EL DOS A CERO

Para los que somos futboleros en este país el sólo hecho de escuchar a alguien decir: «dos a cero», es remontarse a los más recientes resultados de los duelos entre Estados Unidos y México en territorio estadounidense, específicamente en la ciudad de Columbus. Pero no sólo eso, es sentir una especie de dolor provocado por una daga que lastima el orgullo y que nuestro honor como nación futbolera ha sido pisoteado. Parecería que estoy exagerando pero no es así (especifico que solamente se trata de futbol). Los que somos futboleros, nos identificamos plenamente con nuestros equipos en el ámbito local y con la selección nacional en el ámbito global y queremos sentirnos exitosos junto con los logros obtenidos por nuestro club y por nuestra representación nacional. Es por ello que el encuentro de esta noche adquiere mayor relevancia: ya estamos hartos de la burla de los aficionados «gringos» con su cantaleta de «dos a cero» y es por esta razón que el tricolor debe mostrar inteligencia, carácter, coraje, capacidad y todo lo que sea necesario para sacar adelante este compromiso. No soy de los que le tienen mucha confianza al director técnico Juan Carlos Osorio. Y no me da confianza porque me parece demasiado «rollero» y cuando me doy cuenta de que no le creo sus «rollos» empiezo a desconfiar de su capacidad y de que lo que dice en sus «rollos» a veces no es tan fácil de aplicar en la cancha. Pero quienes tienen que creerle son sus pupilos para poder llevar a cabo la estrategia que los encamine a la victoria. Los que sí me dan confianza son los jugadores ya que, si la estrategia del entrenador no va resultando, ellos pueden y deben aplicarse, sobre la marcha, dentro de la cancha y con el partido en pleno desarrollo, para modificar lo conducente en ése preciso momento y una vez decididos hacer acopio de toda su capacidad, y más si es posible. Hoy los futbolistas del tri tienen una gran oportunidad no sólo para reivindicarse con toda la afición mexicana, sino también para reivindicarse con ellos mismos. Una victoria en la casa del Columbus Crew los volvería a colocar como lo grandes héroes deportivos que tanto admiramos y que necesitamos los mexicanos y nos haría olvidar, por unos momentos, la catástrofe deportiva ocurrida en la pasada Copa América Centenario. En otro sentido, no porque México le gane a Estados Unidos el panorama en la relación entre ambos países se va a modificar. El presidente electo Donald Trump no va a cambiar en absoluto su lamentable opinión respecto a México y a los mexicanos ni desechará a sus terribles promesas de campaña. Sin embargo, si el equipo nacional gana, será un golpe anímico muy positivo para la población en general, que cuando se trata del tri se vuelven seguidores, y para los que somos futboleros, sentiremos que nuestro honor habrá sido salvado, al menos de momento, ya que, por ahora, no nos cantarán el famoso «dos a cero». Respecto al camino rumbo al mundial de Rusia 2018, si México gana sólo se habrán conseguido los primeros tres puntos, faltará todavía muchísimo para asegurar el pase a la Copa del Mundo y si pierde igual, se podrá recuperar terreno conforme transcurran los partidos.Pero,para mí, como ya lo manifesté, la importancia de este duelo reside en el orgullo. Yo espero un resultado positivo… Espero ver la mejor actuación del cuadro nacional en la era Osorio. Espero un futbol práctico y efectivo… Espero un triunfo sin tanto «rollo»…

SALÓN DE LA FAMA
El pasado martes se realizó en Pachuca la 6a. Ceremonia de Investidura del Salón de la Fama y como cada año resultó un acto brillante y emotivo. Por este conducto felicito calurosamente al gran Toño Moreno, Director Ejecutivo, por la estupenda organización en este evento que llama cada vez más la atención, tanto de gente ligada con el futbol y como de gente de otros ámbitos. ¡FELICIDADES!

TWITTER:@raul_perez_

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *