Siete personas murieron y otras seis resultaron heridas al ser atropelladas por un vehículo cuando esperaban en una parada de autobús en Brownsville, Texas, informó el domingo la policía.
Martin Sandoval, investigador de la policía de Brownsville, dijo que el suceso ocurrió el domingo a eso de las 8:30 a.m en una parada de autobús cerca de un albergue de migrantes en esa ciudad fronteriza. No queda clara la causa del choque.
El director del albergue, Victor Maldonado del Centro Obispo Enrique San Pedro Ozanam, dijo que vio el video grabado por las cámaras de seguridad tras recibir una llamada notificándole del estrellamiento.
La parada de autobús está al otro lado de la calle del albergue y no está denotada. No había ningún banquillo y las personas estaban esperando sentadas en la acera, dijo Maldonado. Añadió que la mayoría de las víctimas eran hombres venezolanos.
“Lo que vemos en el video as a esta SUV, una Range Rover, ignoró la luz roja que estaba a unos cien pies de distancia y atropelló a las personas que estaban sentadas en la parada de autobús”, declaró Maldonado.
Contó que la SUV se volcó tras montarse sobre la acera y siguió rodando otros 60 metros (200 pies). Algunas personas que iban a pie en la acera a unos 9 metros (30 pies) también fueron golpeadas, relató Maldonado.
El Centro Ozanam es el único albergue para pernoctar en Brownsville, y maneja la liberación de miles de migrantes que están bajo custodia federal. Brownsville es un epicentro de migración en la frontera entre Estados Unidos y México, y se ha convertido en una localidad clave donde se verá el fin, la próxima semana, de las normas contra la inmigración impuestas por la pandemia, conocidas como Título 42.
Sandoval dijo a la emisora KRGV-TV que las autoridades investigan si el hecho fue intencional o un accidente. También evalúan si el conductor, quien fue retenido en el lugar por testigos, estaba ebrio.
Maldonado dijo que el centro no recibió amenazas antes del estrellamiento, pero sí después.
“Sé que un par de personas fueron a la entrada y le dijeron al guardia de seguridad que esto ocurrió por culpa de nosotros”, expresó Maldonado.
El albergue tiene capacidad para 250 personas, pero muchos de los que llegan se van el mismo día. En las últimas semanas, el aumento de las llegadas llevó a la ciudad a declarar una emergencia, y las agencias locales han estado coordinando la respuesta policial y humanitaria.
“En los últimos dos meses hemos estado recibiendo entre 250 y 380 por día”, expresó Maldonado.
Si bien el albergue ofrece a los migrantes transporte durante la semana, están en libertad de usar el transporte público municipal.
“Algunos de ellos estaban en camino a la parada de autobús porque estaban en camino a su destino”, dijo el director.
Con información de: proceso.com.mx