Por Luis Ayala Ramos
A pesar de toda la controversia que generó el anuncio, el ex obispo de Ecatepec, Onésimo Cepeda Silva, se registró como precandidato a diputado local, por el partido Fuerza por México.
Cepeda Silva ha sido un personaje relacionado en varios escándalos mediáticos como el control que ejercía en los políticos de diferentes partidos en Ecatepec y a nivel estatal principalmente, así como mesclar su oficio pastoral con los negocios personales.
Onésimo Cepeda, obispo emérito se registró ante el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) como aspirante a candidato a diputado local por el Distrito 21 por Fuerza Por México.
Cepeda acudió este lunes a las oficinas del IEEM en Toluca, para más tarde trasladarse a la Ciudad de México donde ofreció una conferencia de prensa en la que aseguró que quiere ser diputado porque está harto de “tanto pendejo”.
Desde el anuncio de su aspiración a ser diputado, en redes sociales le recuerdan que por ley no puede ocupar un cargo público debido a que continúa siendo “Ministro de Culto”, es decir aún puede oficiar misas y administrar sacramentos.
La postulación del exobispo católico ha desatado la polémica y es que su registro como candidato a un cargo de elección popular podría ser declarado inconstitucional, debido a que un requisito para ser candidato a diputado es “no ser ministro de algún culto religioso” o haber dejado el cargo cinco años antes de las elecciones.
Aunque presentó su renuncia en 2012 como obispo al entonces Papa Benedicto XVI, la cual le fue aceptada en mayo de ese año; se verificó que su nombre sigue apareciendo ante la Secretaría de Gobernación como ministro de culto en el Directorio de la Dirección General de Asuntos Religiosos.
Recientemente trascendió que Onésimo Cepeda Silva contaba con policías municipales y patrullas de la corporación asignados irregularmente para su custodia, los cuales fueron retirados por el actual gobierno de Ecatepec.
En enero del 2019, a unos días de iniciar gestión, el gobierno de Ecatepec, encabezado por Fernando Vilchis Contreras, reveló en un comunicado de medios que 18 elementos y cuatro vehículos de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito municipal realizaban labores de custodia para el ex gobernador Eruviel Ávila Villegas y el obispo Onésimo Cepeda Silva.
En 1995 se creó la Diócesis de Ecatepec y Onésimo Cepeda fue el primer obispo, hasta que en 2012 fue aceptada su renuncia al cargo, por lo que estuvo 17 años al frente de la misma. El clérigo, actualmente de 84 años de edad, fue nombrado obispo emérito.
En enero del 2019, al realizar la entrega-recepción, el entonces nuevo gobierno municipal detectó “que 18 agentes municipales estaban asignados a la custodia personal de los personajes citados, por lo que de inmediato se determinó asignarlos a labores destinadas exclusivamente a garantizar la seguridad de los habitantes del municipio”.
Las autoridades municipales también encontraron que “el ex funcionario y obispo tenían a su disposición cuatro vehículos entre los que se encuentran una camioneta Ford pick up F150, un Nissan Tsuru y dos camionetas Nissan pick up NP300”.