La intolerancia engendra exclusión, marginación, rechazo y violencia contra quienes no se considera iguales, al partir de prejuicios y estereotipos hacia grupos específicos como son los migrantes, personas de la comunidad LGBTTTI, mujeres y adultos mayores, por tanto es necesario abonar con acciones para evitar o cambiar esas actitudes y pensamientos, destacó el jefe del Departamento contra la Discriminación de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), Mario Ernesto Montes de Oca Bernal.
La Codhem explicó, al ser un organismo garante de la protección de los derechos humanos realiza actividades de sensibilización desde pláticas, hasta cine-debate, performance y la presentación de teatro Guiñol dirigidas a grupos específicos susceptibles de discriminación o violencia, para enseñarles sus prerrogativas.
También se tiene un programa artístico-cultural con la finalidad de crear conciencia para respetar la dignidad de los demás, generar empatía y velar por la no intolerancia, “hay que ponerse los zapatos de la otra persona, de quien tenemos enfrente”; además de capacitar a servidoras y servidores públicos para que no sean intolerantes y, recordarles que la discriminación se castiga por ley.
Muchas veces dijo, se considera que la educación arreglará el problema, sin embargo va más allá, porque son los prejuicios individuales y colectivos los que deben modificarse, como se expresó contra los integrantes de la “Caravana Migrante”, pues a pesar de que con frecuencia se critica la actitud del presidente de Estados Unidos, en México ocurrió lo mismo por parte de algunos connacionales al rechazarlos y exponer los mismos argumentos xenofóbicos.
Si bien indicó, se deben cambiar conductas y forma de pensar desde la casa, recalcó que se requiere un engranaje de factores como los procesos culturales, en la religión e instituciones públicas, donde la sociedad civil organizada debe colaborar y hacer esfuerzos conjuntos con la autoridad, a fin de no imponer estilos de vida a las personas.
“Debe hacerse un ejercicio de autorreflexión” comentó Montes de Oca Bernal, porque existen conductas de intolerancia que están normalizadas, como los comentarios sobre el color de la piel que reflejan racismo.