Refinerías y terminales de combustible de ocho estados de la República se encuentran bajo el resguardo de elementos de la Sedena y Semar.
Como parte de la estrategia nacional contra el robo de combustible, alrededor de cuatro mil militares han sido desplegados en las refinerías de Salamanca, Guanajuato; Ciudad Madero, Tamaulipas; Salina Cruz, Oaxaca; Minatitlán, Veracruz, y la de Cadereyta, Nuevo León.
Asimismo, custodian centros de almacenamiento de Pemex en el Estado de México y Querétaro.
En la refinería Antonio M. Amor de Salamanca, 66 militares se encuentran en las entradas, estableciendo un estricto control de ingreso y salida de empleados debidamente autorizados.
Otros 800 elementos vigilan el municipio de Valle de Santiago y la zona de Pénjamo. En la refinería Antonio Dovali Jaime de Salina Cruz, hay 500 soldados.
En el caso de la refinería Francisco I. Madero de Tamaulipas, los marinos realizan un operativo especial con sobrevuelos en helicóptero. También hay elementos desplegados en las subestaciones de González, Zaragoza, Ciudad Victoria y Reynosa.
Doscientos militares más se encuentran en la refinería Lázaro Cárdenas de Minatitlán, Veracruz. Al menos 63 soldados están en la refinería de Cadereyta, Nuevo León.
También se reforzó la vigilancia en la terminal de almacenamiento y despacho marítimo de Tuxpan y en las instalaciones petroleras de Tierra Blanca, Poza Rica, Medellín de Bravo, Juan Díaz Covarrubias, Ixtaczoquitlán y Fortín de las Flores.
Con información de: lopezdoriga.com