Con una gran sonrisa y ojos amables, Don Antonio Torres, artesano de madera torneada, recibe alegre a chicos y grandes quienes se acercan para aprender a hacer pequeños trompos, baleros y bellas figuras llenas de cultura y tradición.
Como Don Antonio, decenas de artesanos de la capital mexiquense inundan la plaza Fray Andrés de Castro con un mosaico de colores, aromas y sabores a través de sus obras que van desde tejido de palma, pintura, barro, madera, metalistería y delicias como nieves artesanales y amarantinas de leche.
Además, las familias que se acercan a disfrutar el corazón de la ciudad y conocer las piezas que realizan las manos mágicas de estos talentosos toluqueños también pueden aprender cómo hacerlas, ya que la generosidad es característica de nuestros artesanos y buscan que estas tradiciones ancestrales no se pierdan y más personas puedan apreciarlas y valorarlas.
Las y los artesanos esperan a la población con los brazos abiertos de 9:00 a 18:00 horas, de lunes a viernes, y los domingos en la Plaza González Arratia.