Presos del penal federal de Altiplano, en Almoloya de Juárez, enviaron una carta a la Profeco para que revise los precios de la tienda que opera al interior del penal, y que, dicen, abusa con sus precios.
Según las quejas de presos, expuestas en cartas a la Profeco, han llegado a pagar hasta 60 pesos por una bolsa de Cheetos y 83 por una de Ruffles.
Una porción de 38 gramos de Choco Krispis se las han cobrado en 9.50, lo mismo que las Zucaritas.
Un litro de Coca Cola se los cobran a 34 pesos.
Aunque las cartas denuncian que este es el precio que pagan también los familiares que visitan estas cárceles, entre los firmantes hay capos del crimen organizado como Vicente Carrillo Fuentes, «El Viceroy», ex líder del Cártel de Juárez, e Ismael Zambada Imperial, «El Mayito Gordo», hijo de Ismael «El Mayo» Zambada, líder del Cártel de Sinaloa.