Un total de once reos indígenas, reclusos en los Centros de Reinserción Social de Guachochi y Parral recibieron cartas que constan el cumplimiento de al menos la mitad de su sentencia por delitos de bajo impacto, por lo que les fue otorgada su libertad, y podrán volver a sus lugares de origen a reunirse con sus familias.
Como parte de los trabajos interinstitucionales y en apoyo a los integrantes de los grupos vulnerables, el gobierno del estado en coordinación con el Tribunal Superior de Justicia en el Estado, otorgaron el beneficio de libertad anticipada a los 11 internos indígenas.
Fue en la Unidad de Bajo Riesgo, antigua penitenciaria, donde se hizo entrega de las cartas que constan el cumplimiento de al menos, el 50% de la sentencia por delitos de bajo impacto, certificado que avala un adecuado estado psicológico y médico; cuyos resultados fueron acreditados por la autoridad judicial.
Nueve de los internos indígenas, estaban recluidas en el Cereso Número 8, ubicado en Guachochi, y dos internos en el Cereso de Parral, quienes fueron los beneficiarios de este programa que se realiza anualmente, y es promovido por diversas instituciones y organizaciones de apoyo.
“Este es un acto de humanidad, de justicia y misericordia; con el derecho que tienen de disfrutar junto a sus familias mejores condiciones que las que tenían en reclusión, pero también el deber de insertarse ante una comunidad que los espera, anhelando que el progreso y bienestar individual se traduzca en afanes colectivos” señaló el secretario General de Gobierno, César Jáuregui Robles.
Por su parte, internos beneficiarios que obtuvieron su libertad, pasaron al frente a dirigir unas palabras en nombre de sus compañeros, donde agradecieron a quienes los apoyaron para obtener este beneficio, señalando que tras cometer los delitos, lastimaron a otras personas, por lo cual están arrepentidos.
Con información de: elsoldetoluca.com.mx