Durante los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX, los alumnos del Instituto Científico y Literario se caracterizaban por ser virtuosos, racionales y morales, elementos clave del varón moderno, sostuvo la investigadora de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma del Estado de México, Belén Benhumea Bahena.
Durante la presentación del libro Educados para ser varones modernos: masculinidades y relaciones de poder en los Institutenses del Estado de México durante el Porfiriato, la investigadora universitaria explicó que, con base en fuentes históricas de la época, investigó cómo se comportaban los estudiantes de esa época.
En la Facultad de Ciencias de la Conducta, explicó que en la mayoría de los documentos que consultó encontró que se repetían constantemente los conceptos honorabilidad, racionalidad, disciplina, urbanidad, civilidad, productividad, entre otros, los cuáles tomó como categorías de análisis para emprender su investigación.
La historiadora indicó que el positivismo era la base del modelo educativo durante el Porfiriato, ya que con ese tipo de educación se formaban líderes para dirigir a la entidad y el país. Además, con la entrada del positivismo, el Instituto se vuelve Científico. “Eran necesarios líderes capaces de guiar al país y el Instituto era la institución propicia para formarlos”.
Afirmó que como parte de este modelo educativo, las “autoridades son el modelo a seguir, ya que el esquema previo estaba vinculado con la religiosidad y los modelos a seguir eran algunos santos, mientras que con la entrada del positivismo se volcaron hacia los héroes patrios o figuras políticas”.
Belén Benhumea Bahena refirió que esta publicación se encuentra en el Repositorio Institucional de la Máxima Casa de Estudios mexiquense y su consulta es totalmente