La falta de recursos ha provocado no sólo que las farmacias de hospitales pertenecientes al Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) se encuentren vacías, sino también que algunos estudios médicos sean absorbidos por los propios familiares de pacientes, aunque sean cubiertas por recursos del Seguro Popular.
En nosocomios como el Dr. Nicolás San Juan, personal médico se declara en contingencia y anuncian sólo atención de urgencias absolutas.
Durante un recorrido realizado por hospitales de la ciudad, familiares de pacientes coincidieron en señalar que la carencia de medicinas, insumos inclusive algunos estudios han provocado que ellos prácticamente carguen con los gastos.
“En el hospital sólo nos dicen que no hay para medicamentos y aunque dan consulta, tenemos que gastar en las farmacias o en algún laboratorio clínico. Vean este cartel y el personal de este nosocomio ya se declaró en contingencia”, dijo una familiar que esperaba sentada a las afueras del Dr. Nicolás San Juan.
Efectivamente, con un par de mantas colocadas a las afueras de este hospital, los trabajadores dijeron estar en contingencia por la falta de insumos, material quirúrgico, medicamentos y equipo.
De tal suerte refieren, “sólo se dará consulta de urgencias absolutas hasta que contemos con todo lo necesario para brindar la atención de calidad a los pacientes”.
Esta carencia se ha extendido a la gran mayoría de hospitales del sector y por lo mismo, los familiares se ven obligados a subsanar de su bolsillo, con tal de que su paciente mejore su salud.
“Se supone que cuando nos inscriben al Seguro Popular no gastamos dinero, pero con el pretexto de que no hay recursos, nos hacen comprar medicinas y hasta pagar estudios clínicos muy caros”, añadió otro de los quejosos.
Esta situación, dijeron, también se presenta en el llamado Hospital del Niño, donde mediante un oficio mostrado en redes sociales se hace del conocimiento a las autoridades del nosocomio, que ante la falta de insumos necesarios para la realización de los diferentes procedimientos quirúrgicos y de anestesiología, se tendrían que suspender las cirugías programadas hasta nuevo aviso.
Por poner un ejemplo, tan sólo por una resonancia magnética, un familiar puede llegar a pagar 8 mil pesos, gasto que se supone tendría que ser absorbido por el Seguro Popular.
“Nos están pidiendo una resonancia magnética, pero pues no tenemos dinero y aquí nos la piden”, mencionó una madre de familia.
Ante esta situación, hicieron un llamado a las autoridades del sector salud para que se regularice esta situación, ya que sin lugar a dudas afecta a todos los familiares que tienen a un paciente en alguno de los hospitales del ISEM.
“Se supone que hay un presupuesto, ¿dónde está el dinero entonces? No nos vaya a pasar lo de Veracruz o Oaxaca, donde también no hay dinero para hospitales”, subrayó otro inconforme.
Fuemte: El Sol de Toluca