Sean Combs, el magnate de la música también conocido como Diddy, fue arrestado en un hotel de Manhattan la noche del lunes, tras ser imputado por un gran jurado. Combs, de 54 años, enfrentó cargos derivados de una investigación federal relacionada con acusaciones de agresión sexual y abuso físico.
Su equipo legal expresó su decepción ante la decisión de procesarlo, destacando que el empresario había cooperado con las autoridades desde el inicio de la investigación.
El arresto se produjo en el Park Hyatt New York, ubicado en la 57th Street, donde Combs fue detenido alrededor de las 8:30 p. m. por agentes de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional. Según su abogado, Damian Williams, se espera que el martes por la mañana el músico comparezca ante el juez para conocer los detalles del acta de acusación.
Williams, fiscal federal del distrito sur de Nueva York, anunció que en las próximas horas se revelarán los cargos oficiales contra el empresario.
Sean Combs, quien también ha sido conocido bajo los nombres artísticos de Puff Daddy y Diddy, fue una figura central en la expansión del hip-hop durante las décadas de 1990 y 2000. A través de su sello discográfico, Bad Boy Records, impulsó las carreras de grandes artistas como Notorious BIG y Mary J. Blige. Sin embargo, en los últimos años, su trayectoria ha estado bajo la lupa debido a diversas acusaciones de abuso.
El pasado noviembre, la exnovia de Combs, Casandra Ventura, presentó una demanda en su contra, acusándolo de años de abusos sexuales y físicos. Esta denuncia inició una cadena de eventos que culminaron con la reciente imputación.
A pesar de las acusaciones, el equipo legal de Combs insiste en que él no es un delincuente y que colaboró con la investigación de manera voluntaria.
La detención de Sean Combs lo convierte en una de las figuras más prominentes de la música en enfrentar cargos penales por conducta sexual inapropiada desde el caso de R. Kelly, quien fue condenado a más de 30 años de prisión por delitos sexuales.
El arresto de Combs añade un nuevo capítulo en la lista de celebridades cuyo estatus ha sido puesto en duda por investigaciones criminales.
El equipo de Combs emitió un comunicado en el que lo describe como un “icono de la música, un empresario hecho a sí mismo y un filántropo”. Además, subrayan que, aunque es una persona imperfecta, no debería ser considerado como un criminal.
La opinión pública y los seguidores de Combs están a la espera de cómo se desarrollarán los procedimientos judiciales en los próximos días.
Con información de: Expreso