El Gobierno mexicano debate en abrir la vacunación contra la COVID-19 a los menores de edad desde hace una semanas, mientras que en América Latina 13 países han realizado distintos esfuerzos para inmunizar a este sector, con distintos planes que abarcan desde los dos años —en el caso de Cuba—, los seis —en el de Chile y El Salvador— o a partir de los 12 años, como ocurre en la mayoría de las naciones.
En México, el que los menores no sean inoculados en este momento ha llevado a algunos padres de familia a recurrir a amparos para que sus hijos puedan recibir una vacuna, aunque no se trata del único esfuerzo. Esta semana mil jóvenes de 12 a 17 años, hijos de trabajadores de la Industria Maquiladora de Piedras Negras, Coahuila, cruzaron a Estados Unidos para ser vacunados con inmunológicos Pfizer donados por la Ciudad de Eagle Pass, Texas como parte de un acuerdo.
Por su parte, el Gobierno mexicano ha visto con recelo los recursos legales que se han interpuesto para que algunos menores puedan recibir una dosis contra la COVID-19 una situación que llegó a su punto más polémico cuando el subsecretario de Salud y vocero durante la pandemia, Hugo López-Gatell Ramírez, dijo que estos amparos sólo quitaban vacunas a los adultos. A causa de las críticas que despertó su posición, el funcionario aceptó esta semana que un millón de niños con comorbilidades serán inmunizados.
Y pese a que México es un país donde uno de cada 20 niños menores de 5 años y uno de cada tres entre los 6 y 19 años padece sobrepeso u obesidad, padecimientos que incrementaron durante el encierro y que están asociados a una enfermedad grave de COVID-19, el Subsecretario dijo que “es una causa menos frecuente de complicaciones”.
No obstante, en los “Lineamientos para la prevención, detección y atención de COVID-19 en niñas, niños y adolescentes”, emitidos por el propio Gobierno de México el pasado 8 de mayo de 2020, sí se identifica a la obesidad y la diabetes mellitus como factores de riesgos en menores que contraigan la COVID-19.
Tampoco se ha anunciado un plan puntual para vacunar a los más pequeños, mientras que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) sólo ha aprobado el uso de emergencia del fármaco elaborado por Pfizer-BioNTech para su posible aplicación a partir de los 12 años.
Los contagios acumulados en niñas, niños y adolescentes con resultado positivo confirmado de SARS-CoV-2, virus que causa la COVID-19, pasaron de 84 del 12 de abril de 2020 a 72,018 al 12 de septiembre de 2021, de acuerdo con el último corte reportado por el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA).
Por grupos de edad, de los contagios acumulados en este mismo periodo, 18.7 por ciento correspondió a la población de 0 a 5 años, 24 por ciento a la población de 6 a 11 años y 57.4 por ciento a la población de 12 a 17 años. Los mismos datos indican que en este tiempo se han registrado 702 defunciones en menores de edad.
Todo esto se enmarca, además, en medio de un regreso a clases presencial que se determinó un mes antes de que iniciara el Ciclo Escolar y en el que las autoridades educativas han ordenado a los profesores de planteles educativos públicos que se priorice las clases presenciales sobre las virtuales. Pese a ello, sólo 13.2 millones de estudiantes, de alrededor de 30 millones, han vuelto a las escuelas, según informó esta semana la Secretaría de Educación Pública (SEP).
El retorno a las aulas ha llevado además a que se den contagios en diversos planteles y que las autoridades de los estados tomen las decisiones de cerrar algunas escuelas.
Con información de: sinembargo.mx