Alrededor de 320,000 estudiantes latinos de escuelas públicas han dejado sus estudios debido a la actuación conjunta de las autoridades federales de inmigración y las agencias locales de policía, según un informe presentado este martes.
De acuerdo con el análisis publicado por la Asociación Estadounidense de Investigación Educativa, la mayoría de estos alumnos asistían a la escuela primaria y “posiblemente muchos de ellos habían nacido en Estados Unidos“, reportó la agencia de noticias EFE.
Basándose en cifras del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), los investigadores identificaron 55 condados en los que el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) estableció acuerdos de colaboración con las autoridades locales para “identificar, arrestar y deportar residentes indocumentados entre 2000 y 2011″.
Como consecuencia de esta alianza, el número de estudiantes latinos en las escuelas de estos condados disminuyó en un 10%.
“Nuestros resultados subrayan las consecuencias dramáticas y presuntamente involuntarias para los estudiantes y las escuelas de las alianzas de ICE”, dijo Thomas Dee, profesor de la universidad de Stanford y uno de los autores del informe.
Debido a la deserción escolar, “las escuelas contrataron menos profesores”, con lo que el efecto negativo no sólo se notó en la comunidad migrante, también “en la actividad económica local”, agregó Dee.
No se trata de una política exclusiva de la administración Trump. Mark Murphy, coautor del informe, destacó que estas alianzas de ICE también las apoyaron los expresidentes George W. Bush (2001-2009) y Barack Obama (2009-2016).
Sin embargo, bajo la administración Trump este esfuerzo se ha intensificado.
“Dado el reciente apoyo para la rápida expansión de este tipo de alianzas bajo la administración de Trump, estos resultados tienen una relevancia política contemporánea”, agregó.
Murphy señaló que ICE tiene actualmente “90 acuerdos activos con agencias locales de la ley. El incremento de la escala de estas políticas de santuario inverso sugiere que sus costos educativos, económicos y sociales pueden ser aún más severos”.
En un futuro análisis los investigadores esperan poder estudiar la relación actual de colaboración entre agencias federales y locales para cuantificar el posible impacto en la población escolar y sus resultados económicos, reportó EFE.
Con información de: sinembargo.mx