En los últimos 10 años, se han encontrado 3.779 planetas confirmados por diferentes observatorios a lo largo de todo el mundo, pero también hay otros miles de candidatos a ser catalogados como planetas.
Gracias a la nueva generación de observatorios y a los instrumentos de exploración de última generación, como el TESS y el Telescopio James Webb de la NASA o el CHEOPS y PLATO de la Agencia Espacial Europea, la NASA quiere ser más activa que nunca no solo en la búsqueda de vida, sino en la de civilizaciones avanzadas que hayan podido dejar huella en el espacio.
Lo que la NASA va a buscar, o a ayudar a buscar, son lo que han denominado como technosignatures, que no son más que las evidencias de ese paso de una civilización avanzada por los planetas y lunas que conocemos. Es decir, no solo se van a centrar en buscar vida, sino en restos que una civilización haya podido dejar en el espacio, igual que nosotros lo hacemos.
Concretamente, se van a buscar emisiones de láser, luz artificial, calor de un exoplaneta o sustancias químicas en la atmósfera, señales de lo que puede ser una civilización avanzada.
Tradicionalmente, la NASA no se ha involucrado demasiado en la búsqueda de vida en otros planetas, pero en un reciente comunicado han explicado que, debido al interés del Congreso de los Estados Unidos, suscitado en abril de este año, se han visto »obligados» a anunciar estos nuevos esfuerzos para encontrar vida en otros planetas para poder aportar su granito de arena a la ciencia.
Hay evidencias en estos últimos años sobre la psoible existencia de vida, y es una grandísima señal que la NASA vuelva a apoyar esta investigación, ya que desde el programa SETI, que solo estuvo en marcha un año a principios de los 90 antes de ser cancelado, no han vuelto a apoyar en firme las iniciativas para encontrar vida fuera de la Tierra.
Con información de computerhoy.com