Lars Von Trier volvió al festival de Cannes, y una vez más aterró a decenas, esta vez no por sus declaraciones polémicas en torno a la tragedia que supuso la Segunda Guerra Mundial al planeta, sino por las violentas escenas mostradas en su nueva película The House That Jack Built.
La cinta, protagonizada por Matt Dillon, fue exhibida fuera de competencia, siete años después de que se expulsara a Von Trier del certamen, cuando mostró simpatía a Adolf Hitler durante una conferencia de prensa sobre su cinta Nymphomaniac.
El diario El País recogió algunas de las declaraciones del periodista Ramin Setoodeh, de la revista Variety, quien tuvo oportunidad de presenciar lo último del realizador que ha sido acusado de maltratar a las actrices que trabajan para él.
En su cuenta de Twitter, Setoodeh dijo que más de cien personas abandonaron la proyección del filme, que muestra a mujeres y niños siendo mutilados.
“Nunca había visto nada como esto en un festival de cine”, señaló el periodista.
Los ataques de Ramin Setoodeh continuaron en Twitter, en donde describió a The House That Jack Built como la peor película del año.
De acuerdo con la versión del colaborador de Variety, las escena que obligó al público a retirarse muestra a Matt Dillon apuntando con un rifle a dos pequeños niños: “¿Por qué Cannes incluyó este filme en el festival?”, se quejó el hombre.
Setoodeh opinó que la naturaleza de la cinta explica por qué las actrices Riley Keough y Uma Thurman, que participan en ella, no estuvieron presentes en Cannes.
“Vomitivo, repugnante, patético, vil”, son otros de los juicios en torno al trabajo de Lars Von Trier de los que da cuenta El País.
No todo fue malo para el director de Breaking Waves; versiones señalan que quieren aguantaron hasta el final de la proyección ovacionaron con aplausos durante seis minutos al cineasta.
Con información de: reporteindigo.com