Los síntomas confusos del cáncer de ovario pueden demorar entre seis y 12 meses para que una mujer pueda tener un diagnóstico, lapso en el que la tumoración puede crecer y extenderse hacia la cavidad abdominal, dijo hoy una especialista.
“Contrario a lo que se piensa, el cáncer de ovario no se detecta a través de un estudio de papanicolaou y ese es uno de los grandes problemas”, dijo en un comunicado la doctora Dolores Gallardo Rincón, Responsable del Programa de Cáncer de Ovario del Instituto Nacional de Cancerología (INCan).
De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de ovario afecta a más de 250 mil mujeres en el mundo y es responsable de la muerte de más de 140 mil cada año.
Debido a que se diagnostica tarde, en el 70 por ciento de los casos el pronóstico para las pacientes empeora, pues solo 45 por ciento tienen posibilidades de sobrevivir cinco años.
En México, 4 mil mujeres son diagnosticadas cada año con esta enfermedad, y cada día este padecimiento se cobra la vida de siete mexicanas.
La especialista detalló que el cáncer de ovario se presenta con mayor frecuencia en mujeres de entre 45 y 60 años, particularmente en aquellas que cursan la etapa de la menopausia.
En tanto, la ausencia de síntomas específicos dificulta su diagnóstico temprano, pues puede llegar a confundirse con otras afecciones, como colitis.
También se puede presentar dolor abdominal difuso, tipo cólico, ya sea leve o moderado, distensión abdominal, estreñimiento alternado con diarrea y sensación de saciedad. Otras señales son dolor pélvico, de leve a moderado, hacia los lados de la pelvis y la sensación de tener que evacuar, lo cual surge a partir de que la tumoración ovárica comprime al recto.
Estas molestias llevan a la mujer a ir con médicos generales, gastroenterólogos, internistas y ginecólogos que no logran sospechar sobre la enfermedad.
“Si una mujer presenta síntomas digestivos o pélvicos 12 veces o más en un mes, debe realizarse un ultrasonido transvaginal; sobre todo si pertenece al grupo de edad más vulnerable: de los 45 a 60 años”, recomendó Gallardo Rincón.
a Laspecialista explicó que el riesgo aumenta cuando hay historia familiar de cáncer de mama u de ovario, mientras que si existen hasta dos personas con estos tipos de cáncer en la familia, el riesgo se eleva de un 35 a 45 por ciento, y en un 25 por ciento cuando los casos están asociados a la mutación de los genes BRCA1 y BRCA2.
Si existe un patrón hereditario, esta enfermedad puede presentarse desde los 35 años.
Del mismo modo, la terapia de reemplazo hormonal, si se toma más de dos años, aumenta 2.5 veces la posibilidad de padecerlo.
Es por ello que la experta recomendó que si existen estos factores de riesgo deben iniciarse pruebas de tamizaje, pues si se detecta en etapa uno es curable.
El 8 de mayo se conmemora el día mundial contra esta enfermedad con el fin de informar y hacer conciencia de este padecimiento.
Con información de sinembargo.mx