Una familia de Houston, Texas, está viviendo una pesadilla, luego de que uno de los niños de la casa falleciera por jugar inocentemente a las escondidillas y ocultarse en el sitio equivocado.
Fernando Hernández Jr., de 9 años, estaba jugando dentro de casa con su hermano mayor al escondite, y se le ocurrió que la secadora sería el sitio perfecto para ocultarse y que no lo encontraran.Desafortunadamente, luego de un largo rato y mientras su madre cocinaba la cena, su hermano lo halló… pero muerto.
“Mi novio lo recogió y lo llevó a la casa. Estaba púrpura. Sus ojos estaban abiertos. Se había ido”, narró Christina Rodríguez, la madre de Fernando, en entrevista para la cadena de noticias ABC 13.
En minutos llegaron los paramédicos para atender la emergencia reportada por el 911, nada pudieron hacer. Fue trasladado de urgencia al hospital más cercano, en donde tan solo un par de horas después lo declararon oficialmente muerto.
Con información de:sinembargo.mx