El implementar alcoholímetros en bares y restaurantes es perjudicial para la economía de los 30 mil negocios con venta de bebidas alcohólicas, pues además de representar una fuerte inversión, no contribuye a disminuir los índices de consumo, aseguró Patricio González Suárez, presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes del Estado de México (Asbar).
«No hay evidencia de que sea necesaria o sea un método para que la gente consuma menos, el poner el alcoholímetro no garantiza que consuma menos, además como establecimiento no somos autoridad no podemos restringir al cliente, no podemos retener su auto, nada más seria como método estadístico», expresó.
El líder empresarial recordó que esta acción fue implementada hace ya varios años, el cual pedía un alcoholímetro por cada 30 comensales, situación que era inviable por el costo elevado del aparato que ronda entre 15 y 20 mil pesos y lugares grandes necesitaban hasta 10, en el sa ocasión dijo se habló con las autoridades y el gremio fue escuchado y se suspendió. Ahora la Coprisem anunció que se implementará nuevamente dicho programa.
González Suárez, añadió que la asociación ha implementado programas que son más factibles, como las conferencias impartidas a jóvenes y el programa de consumo responsable en los establecimientos, los cuales son más profundos, «hay conciencia en los empresarios mexiquenses y se está haciendo bien».
Asimismo, el presidente de Asbar indicó que actualmente hay pocos alcoholímetros instalados en algunos municipios, sin embargo, dijo solo sirven de adorno actualmente y podrían seguir así ya que los empresarios no podrían obligar a los comensales a realizarse la prueba.
Por ello exhortó a las autoridades a analizar el tema y no se imponga la instalación de los aparatos, pues no van a funcionar para los que realmente quieren, «esperemos que la nueva administración de igual forma lo entienda… No pediremos tanto a un plazo, lo que pediremos es que no se aplique, si la autoridad insiste entonces pediremos al gobierno que la subsidie, nosotros ya pagamos un impuesto por venta de bebidas alcohólicas» enfatizó.
Además Patricio González estableció que podría tratarse de un tema de negocio para beneficio de une empresa… «y digo un gran negocio porque estamos hablando de cerca de 450 millones de pesos», además dijo podría representar la salida de inversionistas de la entidad.
«Cada piedrita que no son van poniendo va restando competitividad con otros estados entonces creemos que con más trabas que nos impongan, el empresario podría buscar otros estados para establecer sus negocios», finalizó.