Emmanuel Macron, presidente de la República francesa, hizo este viernes un balance de fuerte contenido patriótico de los atentados terroristas de Carcasona y Trèbes, perpetrados por la mañana, que se cobraron tres vidas, dieciséis heridos (cifra provisional) y culminaron con la muerte a tiros del autor, un asesino fanático, encarnación de la creciente «amenaza endógena» que se cierne sobre Francia. Su acción ha sido reivindicada por la organización terrorista Daesh.
Tras abandonar la cumbre europea de Bruselas para ofrecer su balance personal de los tiroteos y matanzas, el presidente Macron hizo en París esta valoración del sangriento ataque: «Sabíamos que sobre Europa, en general, y sobre Francia, en particular, existen amenazas terroristas elevadas siempre. En nuestro caso, a esa amenaza exterior se suma una amenaza endógena, una amenaza interna, nacional, íntimamente relacionada con las que llegan de Europa. Nuestra determinación es absoluta, total».
«La respuesta de nuestras fuerzas de seguridad ha sido rápida y eficaz, heroica –continuó Macron–. El comportamiento de nuestros gendarmes y comandos ha permitido salvar muchas vidas. El comportamiento de Arnaud Beltrame, el oficial que se ofreció a sustituir a una mujer, como rehén, merece el respeto y homenaje debido a los héroes. Se jugó la vida. Francia está unida ante la amenaza. Seguiremos unidos».
Horas antes de que Macron hiciese este balance personal, Daesh había presentado al terrorista Redouane Lakdim (26 años) como un «soldado» que asesinó para cumplir una misión terrorista «en nombre del islam».
Sin embargo, los asesinatos de Lakdim, entre las 11 y las 14,25, están muy alejados del comportamiento de un militar. Fueron un nuevo modelo canónico de fuga fanática, enloquecida y asesina.
Lakdim comenzó por matar a tiros al pasajero e hiriendo gravemente al conductor de un coche que robó a punta de pistola, un Peugeot 205 gris, en la periferia de Carcasona (46.000 habitantes), una ciudad de provincias del sur, con una legendaria ciudadela medieval y unos suburbios multiculturales donde vivía Lakdim con su familia desde hace años. El domicilio de la familia del criminal había sido visitado la semana pasada por una unidad policial.
Con información de: abc.es