Sudán, el último ejemplar macho de rinoceronte blanco del norte, tuvo una muerte asistida este lunes en el centro de conservación donde se le cuidaba de enfermedades correspondientes a sus 45 años de edad, informaron autoridades de Kenia.
De acuerdo al informe, el ejemplar era tratado de complicaciones de salud relacionadas con su edad, las cuales le habían generado cambios degenerativos en sus músculos y huesos, que se combinaban con heridas en la piel.
El equipo de veterinarios de los zoológicos Dvůr Králové y Ol Pejeta, así como el Servicio de Vida Salvaje de Kenia, determinaron tras 24 horas de agudo sufrimiento en que ya no pudo ponerse en pie, aplicar la eutanasia a Sudán, dijo un reporte médico veterinario.
Gracias a su vida en Ol Pejeta, Sudán pudo apoyar la mantención de su especie al preñar a dos hembras durante su vida reproductiva.
Además, apenas este lunes le fueron tomadas muestras de material genético para realizar intentos de reproducción de rinocerontes blancos del norte mediante tecnologías celulares.
La muerte de Sudán ha llevado a un punto crítico la supervivencia de la subespecie del rinoceronte blanco del norte, señalaron expertos de Ol Pejeta.
Solo quedan dos hembras, su hija Najin y la hija de esta Fatu, ambas en el centro de conservación Ol Pejeta.
La unica esperanza de sobrevivencia es el desarrollo de una técnica de fertilización in vitro usando semen almacenado de machos y óvulos de hembras de esta subespecie, que serán implantados en dos ejemplares que servirán como madres subrogadas.
Con información de: cronica.com.mx