Hace cinco años, más de medio siglo, Francia vivió momentos preocupantes, ambientalmente hablando. El lobo, un mamífero que llegó a ocupar gran parte del territorio de ese país en el siglo XVIII, desapareció por completo y no había forma de encontrar alguno dentro de sus fronteras.
Entre 1930 y 1936, el lobo se declaró extinto de Francia, y no fue hasta 1992 cuando el gobierno de ese país decidió llevar a dos lobos de Italia para comenzar los esfuerzos de rescatar a esa especie.
En 2013 se lanzó el “Plan lobo”, con el cual se pretendía aumentar la población de ese mamífero y así preservar su especie para que nunca se vuelva a extinguir de Francia.
Con información de : reporteindigo.com