La primera ministra británica, Theresa May, acaparó ayer los reflectores y le llovieron críticas durante el cierre del congreso anual del Partido Conservador en Manchester, y es que hubo un detalle que se robó las miradas de los presentes, y es que la premier tenía puesta en su muñeca de la mano derecha un brazalete lleno de pinturas y con imágenes de la pintora comunista mexicana Frida Kahlo.
Los medios británicos destacaron que May durante su discurso tuvo varios ataques de tos (como consecuencia de resfriado) pero ese no fue el detalle que más llamó la atención, sino el brazalete que sin duda atrajo las miradas de los asistentes.
La pulsera estaba compuesta por varios rectángulos con distintas imágenes de la artista mexicana. A muchos les llamó la atención que luciera esta joya de una pintora situada en el punto opuesto del espectro político: Kahlo fue comunista e incluso tuvo un breve romance con el revolucionario ruso León Trotski.
Medios como el periódico The Independent recogen las críticas que su elección estilística recibió en redes sociales, donde algunos aseguran que la artista, que se interesó por cuestiones de género, clase y raza hubiera rechazado que la primera ministra británica llevara ese brazalete.
Con información de: cronica.com.mx