No hay marcha atrás. La jornada 10 del futbol mexicano no se jugará. Al menos no este fin de semana. Los árbitros de primera división se declararon en huelga tras la suspensión de 10 partidos impuesta a Pablo Aguilar por agredir al árbitro Fernando Hernández en el encuentro entre Tijuana y América.
De acuerdo con información de nuestro reportero Rubén Rodríguez, los silbantes exigen que se respete el reglamento de sanciones, pues consideran que la acción del defensa paraguayo es un ataque artero hacia el oficial y no un «intento de agresión», que fue lo que reportó Eugenio Rivas, presidente de la Comisión Disciplinaria.
Fuente: foxsports.com.mx