La elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos afectó de manera inmediata a los migrantes que de todo el mundo radican en ese país, quienes “viven un ambiente más hostil, debido a que algunos estadounidenses se sienten con el permiso de señalarlos y denigrarlos”, sostuvo la coordinadora del Centro de Investigación y Estudios en Movilidades y Migraciones internacionales de la Universidad Autónoma del Estado de México, Norma Baca Tavira.
Luego de resaltar que se prevé un incremento considerable en las deportaciones, la investigadora universitaria destacó que el Estado de México es la cuarta entidad mexicana expulsora de migrantes a Estados Unidos.
“A pesar de que los mexicanos migran a diversos países, como Canadá, España e incluso, de Latinoamérica, Estados Unidos continúa siendo su principal destino, así como el de migrantes de todo el mundo”.
Baca Tavira enfatizó que mejorar su economía y nivel de vida es uno de los principales motivos de los migrantes, pero también influyen otros elementos en la incidencia de este fenómeno, como reunirse con algún familiar o brindarle apoyo, además de factores ambientales y contextos de violencia, es decir, una migración forzada, como la que viven los sirios.
En el marco del Día Internacional del Migrante, que se conmemora cada 18 de diciembre, la investigadora manifestó que las situaciones a las que se exponen los migrantes al llegar a otro país dependen de su estatus migratorio.
Así, puntualizó, los documentados tienen una mejor estadía, en comparación con la de los indocumentados, quienes se exponen a riesgos al llegar al país destino, pero principalmente durante su trayecto.
Norma Baca Tavira subrayó que en la actualidad, no se pueda hablar de “la migración” y sí de “las migraciones”, ya que este fenómeno no ocurre de forma homogénea y varía dependiendo del lugar de procedencia, destino, edad y género de los migrantes, distancias y territorios que atraviesan, pero también de si la movilización es individual o colectiva.