Raúl Cervantes Andrade rindió protesta ayer como nuevo Procurador General de la República, con la intención de convertirse en el primer fiscal General del país.
En una aprobación sin discusión, con 82 votos a favor, tres en contra y una abstención, el pleno del Senado de la República, ratificó a Raúl Cervantes Andrade, como nuevo titular de la PGR en sustitución de Arely Gómez González quien se espera este jueves sea ratificada como nueva secretaria de la Función Pública a propuesta del Ejecutivo Federal.
Durante su comparecencia ante los integrantes de la comisión de Justicia, previo a su ratificación, Cervantes Andrade confirmó que llega a su nuevo cargo para trabajar en la transición hacia la Fiscalía General de la República y de esa manera reconoció sus aspiraciones de convertirse en Fiscal General.
Señaló que cuando le hicieron la invitación para ser Procurador de la República, hizo una reflexión con el Presidente: “sin autonomía y una ley adecuada, no hay ningún interés de que se pueda ejercer una buena función de impartición de justicia, pero sobre todo en la procuración y en la evolución”.
Ante ello respondió directamente al cuestionamiento de la senadora del PRD, Angélica de la Peña: “sí vengo y lo dice ese comunicado del poder y se los digo abiertamente y he verbalizado todo el tiempo y el discurso lo dice, es en breve generar una ley que tenga la potencia, credibilidad y funcionalidad de lo que necesita México para ejercer acción penal y que el transitorio habilitaría que fuera yo procurador, que pasaría a la fiscalía”.
Invitó a los legisladores a llevar a cabo un amplio proceso de consulta y debate abierto, para que a partir de diagnósticos amplios y certeros se cuenten con los insumos necesarios para proponer el mejor diseño organizacional, administrativo y funcional de la Fiscalía General de la República, que sirvan de base para crear su futura ley orgánica.
Se pronunció por involucrar en este proceso a la sociedad civil, académicos, investigadores, especialistas nacionales e internacionales, servidores públicos dedicados a la procuración e impartición de justicia, medios de comunicación y legisladores, a fin de construir el mejor modelo de Fiscalía que le permita llevar a cabo su misión.
Sobre los casos pendientes que tiene la Procuraduría General, dijo que dará continuidad a los grandes casos pendientes: “entre los que se encuentran Ayotzinapa, Tanhuato, gobernadores, Nochixtlán, desaparecidos, Tlatlaya, por citar algunos”.
Reconoció el trabajo que al respecto encabezó su antecesora, Arely Gómez, aunque aclaró que “lo importante, sería intensificar las investigación, sin escatimar esfuerzo alguno”.
Dijo estar convencido que la mejor manera de detener los problemas “es generando una institución para que no se repita el halo que pareciera de impunidad, al no resolución”.
Reconoció que el primer paso para solucionar el problema de la credibilidad, la funcionalidad y la eficacia en el ejercicio de la acción penal, tiene que ver con la autonomía, por lo que insistió en crear una Fiscalía potente, con facultades, con determinación de proceso y capacidad de investigación.
En todo momento hizo énfasis en la necesidad de poner en el centro del sistema a la persona y los derechos humanos.
FUENTE: 24-horas.mx