Las fotografías quedan presentes en internet donde se «ven y comercian como tarjetas de béisbol por los abusadores de menores, pederastras y extorsionistas».
El sheriff del condado de Los Ángeles, Jim McDonnell, alertó este domingo a los ciudadanos sobre la peligrosidad de un hábito cada vez más frecuente entre los menores de tomarse «selfies» sin ropa y compartirlos en internet, una moda que les expone a pederastas que buscan en el ciberespacio a sus víctimas.
En lo que va de año, el Buró de Tráfico de Personas (HTB) del Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles (LASD) ha investigado ya 81 casos de fotografías y vídeos comprometedores de menores que se han compartido en las redes. «La cantidad de esas imágenes se cuenta por miles», comentó McDonnell en una carta abierta.
En 2015, LASD investigó 519 casos de fotos de niños y niñas desnudos de edades a partir de 8 años.
«Lo que puede haber empezado como una imitación de una tendencia en internet, se está manifestando como un nexo entre nuestros adolescentes y los depredadores que buscan explotarlos para obtener un beneficio», aseguró el alguacil.
McDonnell indicó que de todos los casos de «selfies» de menores desnudos que trabajaron el año pasado, uno de cada cuatro correspondió con fotografías que los propios menores se tomaron a sí mismos por amor, por rebeldía, en un intento de llamar la atención, o «porque fueron engañados por alguien que se hacía pasar un amigo», explicó.
«Demasiado a menudo, estas imágenes termina en internet o en manos de depredadores de menores, algunos de los cuales realmente contactan a esos niños con intención específica de llevarlos a una relación, extorsionarlos para obtener fotos y vídeos adicionales y, en algunos casos, incluso dinero», señaló McDonnell, quien apuntó que esto ocurre le ocurre a menores de todas las razas y clases sociales.
El sheriff de Los Ángeles advirtió a los padres de que los adolescentes pueden empezar en esas conductas porque es algo que ven en los medios de comunicación y porque creen que sus cuentas de internet son «verdaderamente privadas y seguras». Sin embargo, las redes criminales son cada vez «más sofisticadas» y «cazan a sus próximas víctimas» en plataformas que «los padres creen que (se usan) solo por diversión».
McDonnell calificó de «engañosas» las plataformas digitales que aseguran que las fotografías compartidas desaparecen después de ser vistas.
«Déjeme ser claro: estas imágenes nunca desaparecen», afirmó el alguacil, que argumentó que las fotografías quedan presentes en internet donde se «ven y comercian como tarjetas de béisbol por los abusadores de menores, pederastras y extorsionistas». Las imágenes, explicó el sheriff, pueden terminan en archivos compartidos en internet.
«Después, nuestras jóvenes víctimas caen en depresión a menudo y tienen tendencias suicidas que les duran toda la vida», declaró McDonnell, quien pidió a los padres que tomen consciencia de las consecuencias que puede acarrear el «sexting» -compartir mensajes de contenido sexual- y las fotos de desnudos.