El yoga, una práctica basada en la unión de cuerpo, mente y alma que se ha extendido desde la India a todo el mundo, fue declarada hoy Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por el Comité Intergubernamental de la Unesco reunido en Adís Abeba (Etiopía).
Según la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, «la filosofía subyacente a la antigua práctica del yoga en la India ha influido en numerosos aspectos de la sociedad de este país, que van desde la salud y la medicina hasta la educación y las artes».
El yoga combina la práctica de una serie de posturas o asanas con la meditación (dhiana) y el control de la respiración (pranaiamas). Es accesible a personas de cualquier edad y, aunque tradicionalmente era transmitida por gurús, actualmente se enseña incluso desde las redes sociales.
Además del yoga, hoy pasaron a formar parte de la lista de Patrimonio Inmaterial de la Unesco la cetrería, cuya candidatura estaba impulsada entre otros por España; la fiesta iraquí de Khidr Elias (en honor al personaje legendario preislámico Al Khidr o El Verde), los tambores y danzas con palos del Almezmar en Arabia Saudí y la lucha kursei en Kazajistán.
Fuente; La Jornada