El presidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), James Cavallaro, exhortó a «cambiar la narrativa» de que los 43 estudiantes desaparecidos fueron incinerados en el basurero de Cocula.
«No se pueden seguir reforzando la tesis del basurero; no hubo tal incendio, por lo que se tienen que revisar otras líneas de investigación», aseguró.
En conferencia, donde se presentó la metodología que utilizará el mecanismo especial de seguimiento para el caso Iguala, Cavallaro citó, solo por ejemplo, una docena de diligencias y hechos todavía pendientes por investigar.
Entre estas últimas están la realización de las entrevistas a los elementos militares del 27 Batallón de Iguala, que estuvieron presentes en varios de los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014; el tráfico de los teléfonos celulares implicados en los hechos, y la actuación del Tomás Zerón, funcionario que encabezó durante año y medio dichas investigaciones.
En tanto, Enrique Gil Botero, comisionado de la CIDH y coordinador del mecanismo de seguimiento, informó que las autoridades ministeriales del país dijeron que han dado cumplimiento a la mayoría de las recomendaciones emitidas por el grupo de especialistas enviado por la CIDH hace algunos meses.
Gil Botero, James Cavallaro y el secretario ejecutivo de este organismo interamericano, Paulo Abrao, fueron recibidos por la secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, y por el procurador general de la República, Raúl Cervantes Andrade, así como por integrantes de estas dependencias y de la Secretaría de Gobernación.
Con lo anterior se inició de manera formal las labores del mecanismo relacionado con la desaparición de 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, suceso ocurrido en septiembre de 2014.
La canciller dijo que lo anterior ilustra el compromiso del gobierno mexicano para que, con los familiares de las víctimas, se avance en el esclarecimiento de los terribles acontecimientos, se encuentre toda la verdad, se sancione a los responsables, y se refuerce la atención integral a las víctimas.
Reiteró la disposición al diálogo “franco y transparente” con la CIDH, en especial para instrumentar las medidas cautelares correspondientes, con la asistencia del mecanismo coordinado por Gil Botero.
El procurador general de la República reiteró el compromiso “de continuar agotando todas las líneas de investigación en el caso y de fortalecer la interlocución con los familiares de las víctimas y sus representantes para su esclarecimiento efectivo”.
Después de este encuentro, Gil Botero se reunió con integrantes de alto nivel de las dependencias en mención para presentar el plan de trabajo del esquema de seguimiento para el próximo año.
Hasta el momento la Procuraduría ha dado cumplimiento al 93 por ciento de las recomendaciones que en su momento hiciera el grupo de especialistas que ayudaron y asesoraron al Estado mexicano en el caso Ayotzinapa.
Afirmaron que la indagatoria continúa siguiéndose todas las líneas de investigación, sin excluir ninguna de ellas. Asimismo, se informó al comisionado Gil Botero del uso de tecnologías avanzadas para la realización de nuevos operativos de búsqueda, y las medidas tomadas hasta ahora para atender integralmente a las víctimas.
Fuente: La Jornada